Hoy he leído en prensa que un dron, va a sobrevolar todo el recorrido de una romería, como otras muchas, que se celebrarán este fin de semana.
El recorrido será de algo más de 7 km, donde romeros, niños y caminantes acompañaran a su Virgen hasta la ermita, de ello, será testigo un dron!!!!! para poder grabar todo y cada uno de los movimientos que se vayan sucediendo. Hasta aquí todo bien, pero…¿Sabemos de los riesgos que ello puede conllevar?
Desde éstas lineas les damos las pautas exigidas por AESA (Agencia Estatal de Seguridad Aérea)
Antes de volar con un Dron se debe: Estar habilitado en AESA. Tener un seguro de responsabilidad civil. Ser piloto de drones (conocimientos teóricos y prácticos del modelo de aeronave a pilotar y tener certificado médico en vigor).
Requisitos comunes para poder volar un Dron: A una altura máxima de 120 m (400 pies). De día y en condiciones meteorológicas favorables. Fuera de aglomeraciones de edificios, zonas urbanas, habitadas o de reuniones de personas al aire libre….
De momento y hasta que la ley no cambien, NO se puede volar un dron en: zonas urbanas, sobre aglomeraciones de personas: parques, playas, procesiones, manifestaciones, bodas, conciertos…
Las multas por incumplir la normativa, varían en función de los daños causados. Aunque es importante, lo más importante de todo es que estamos poniendo en peligro la vida de terceros.
Hasta el modelo más pequeño de dron, puede causar una desgracia, pues… puede llegar, en estas situaciones que hemos comentado en las que está prohibido volar, a caer sobre la cabeza de algún individuo que vaya, en este caso acompañando a su Virgen y lo que sería un día de alegría y convivencia, se puede convertir en un contratiempo peligroso.
Por favor!!!! mucha cautela.